Una luna de día,
una noche sin nada,
un bodegón de planetas,
un movimiento que para.
Creo que llamaré a estas fotos
las historias que hasta ahora nunca he podido hacer.
Unos planos con planes
poco enfocados
sin sombras,
con figuras bien nítidas,
con el ISO bien bajo,
con el zoom al tope
y una profundidad de campo cercana.
Creo que llamaré a estas fotos
las historias que imposbles algún día podré hacer.
Unos niños desnutridos donando a los ricos,
un mendigo regalando joyas,
un banquero compartiendo cartones,
un político haciendo bien algo.
Creo que llamaré a estas fotos
las historias que algún día podremos contar.
Una montaña con rutina
una ciudad con aire puro,
una capa de ozono sin daños,
un universo limitado.
Creo que llamaré a este poema
las fotos que nunca he podido hacer.
No hay comentarios:
Publicar un comentario